Queridos lectores!
"Soy un tío fantástico! He encontrado el camino del Árctico hasta el sur de España y es hora de reponer fuerzas en esta playita de las salinas!":
Pero un pariente también quiere buscar comida en la misma playa y se ve inmediatamente atacado por su dueño. El pobre intruso no sabe lo que le está pasando y ...
... apenas se puede defender de los furiosos ataques:
Todo vale, bien sean rabiosos puntapiés o ...
... enérgicos picotazos:
Y si todo esto no surte efecto, hay que aterrizar encima del asustado adversario:
Al pobre visitante no le queda otra que tomar las de Villadiego con cara de pavor:
"Pues, no solamente soy muy guapo, sino también tremendamente valiente!" Por fin nuestro pequeño correlimos menudo puede empezar a buscar alimentos, pero esto sí, siempre pendiente del cielo. Y cuando descubrió algún pariente, lo atacaba inmediatamente en vuelo:
Saludos cordiales
Birgit Kremer